Relato – ….::::: Historias y Relatos :::::….. https://devfredd.online Historias, Relatos y Cuentos Tue, 28 Jan 2025 02:11:06 +0000 es hourly 1 https://wordpress.org/?v=6.7.2 https://devfredd.online/wp-content/uploads/2025/01/cropped-HYR_Logo_GW-150x150.png Relato – ….::::: Historias y Relatos :::::….. https://devfredd.online 32 32 Cuento corto – El Guardián del Roble susurrante https://devfredd.online/cuento-corto-el-guardian-del-roble-susurrante/ https://devfredd.online/cuento-corto-el-guardian-del-roble-susurrante/#respond Sat, 25 Jan 2025 19:50:12 +0000 https://devfredd.online/?p=1781 cuento corto

En el corazón del Valle de las Sombras Eternas, donde los picos montañosos se elevaban hacia el cielo como dedos huesudos y la niebla danzaba perpetuamente entre los árboles centenarios, se alzaba un roble majestuoso. No era un árbol común; sus ramas retorcidas se extendían como brazos implorantes, cubiertas de musgo esmeralda y líquenes dorados, y su tronco, grueso como una torre, parecía latir con una vida propia. Era conocido como el Roble Susurrante, y se decía que albergaba el espíritu de un antiguo guardián.

En una pequeña aldea al pie del valle, vivía un joven llamado Elian. Huérfano desde temprana edad, Elian había crecido escuchando las historias que los ancianos contaban sobre el Roble Susurrante y su guardián. Se decía que el árbol protegía el valle de las fuerzas oscuras que acechaban en las sombras, y que el guardián, un ser de gran sabiduría y poder, se comunicaba con aquellos que se acercaban con un corazón puro.

Elian, atormentado por la soledad y la curiosidad, sentía una profunda fascinación por el roble. Una noche de luna llena, impulsado por un impulso irresistible, decidió aventurarse en el Valle de las Sombras Eternas. La niebla era espesa y fría, y el silencio solo era interrumpido por el crujir de las ramas bajo sus pies. A medida que se adentraba en el valle, la sensación de estar siendo observado se hacía más intensa.

Finalmente, llegó al claro donde se alzaba el Roble Susurrante. La luz de la luna bañaba el árbol, dándole un aspecto espectral. Elian se acercó con cautela y colocó una mano sobre el tronco rugoso. En ese instante, sintió una corriente de energía recorrer su cuerpo, y una voz suave y profunda resonó en su mente.

«¿Quién busca al Guardián?», preguntó la voz.

Elian, sorprendido pero sin miedo, respondió: «Soy Elian, un humilde aldeano. He venido a buscar sabiduría».

«La sabiduría no se encuentra buscando, sino escuchando», respondió la voz. «Escucha el susurro del viento entre mis ramas, y encontrarás la respuesta que buscas».

Elian cerró los ojos y se concentró en el sonido del viento. A medida que escuchaba, las palabras comenzaron a formarse en su mente: palabras de aliento, de esperanza, de conexión con la naturaleza. El guardián le hablaba de la importancia del equilibrio, de la necesidad de proteger el valle de las fuerzas oscuras que intentaban corromperlo.

Durante muchas noches, Elian regresó al Roble Susurrante. El guardián le enseñó los secretos del bosque, el lenguaje de los animales y el poder de las plantas. Le reveló que las fuerzas oscuras que amenazaban el valle estaban lideradas por un antiguo mago exiliado, consumido por la ambición y el deseo de poder. Este mago, llamado Malkor, buscaba controlar la energía del valle para desatar un caos que le permitiría gobernar sobre todo el reino.

El guardián le confió a Elian una importante misión: debía encontrar un antiguo artefacto mágico, conocido como la Piedra del Equilibrio, que era la única fuerza capaz de contrarrestar el poder de Malkor. Le indicó que la piedra se encontraba oculta en las profundidades de la Cueva de Cristal, un lugar peligroso custodiado por criaturas temibles.

Elian, a pesar del miedo, aceptó la misión. Sabía que el destino del valle dependía de él. Con la guía del guardián, aprendió a usar las plantas para curar heridas y crear pociones, a comunicarse con los animales para obtener información y a moverse sigilosamente por el bosque sin ser detectado.

Después de muchas semanas de preparación, Elian se adentró en la Cueva de Cristal. El camino era oscuro y tortuoso, y el eco de sus pasos resonaba en las paredes de roca. Se enfrentó a arañas gigantes, murciélagos voraces y otros peligros que acechaban en la oscuridad. Finalmente, llegó a una cámara subterránea donde, sobre un pedestal de cristal, brillaba la Piedra del Equilibrio.

En ese momento, Malkor apareció. Su rostro estaba demacrado y sus ojos brillaban con una luz malévola. «Has llegado demasiado tarde, muchacho», dijo con una voz fría y amenazante. «La piedra será mía, y con ella, el poder para gobernar este reino».

Se desató una feroz batalla. Malkor desató poderosos hechizos, pero Elian, utilizando las habilidades que le había enseñado el guardián, logró esquivarlos y contraatacar. Finalmente, en un último esfuerzo, Elian logró tocar la Piedra del Equilibrio. Una poderosa energía emanó de la piedra, envolviendo a Malkor y despojándolo de su poder. El mago cayó al suelo, derrotado.

Con Malkor derrotado, la paz regresó al Valle de las Sombras Eternas. Elian regresó al Roble Susurrante, donde el guardián lo felicitó por su valentía. El joven comprendió que la verdadera sabiduría no solo se encuentra escuchando, sino también actuando con coraje y determinación. Elian se convirtió en el nuevo guardián del valle, protegiéndolo de cualquier amenaza y manteniendo el equilibrio entre la naturaleza y el mundo humano. El susurro del roble ya no era solo un mensaje del pasado, sino una guía para el futuro.

]]>
https://devfredd.online/cuento-corto-el-guardian-del-roble-susurrante/feed/ 0
Novela corta – El Eco de tu Nombre en la Casona Antigua https://devfredd.online/novela-corta-el-eco-de-tu-nombre-en-la-casona/ https://devfredd.online/novela-corta-el-eco-de-tu-nombre-en-la-casona/#respond Sat, 25 Jan 2025 19:24:41 +0000 https://devfredd.online/?p=1770

novela corta

Isabela, una joven restauradora de arte con una pasión por el pasado y una sensibilidad especial para percibir las energías de los lugares, llega a un antiguo pueblo colonial enclavado en las montañas colombianas. Su misión: trabajar en la restauración de una casona que perteneció a una influyente familia de la región, los Valderrama. La casona, conocida como «Villa Esperanza», se alza majestuosa pero en un estado de abandono parcial, rodeada de jardines exuberantes que han crecido sin control, creando una atmósfera de melancolía y misterio. Las enredaderas trepan por sus muros de piedra, ocultando detalles arquitectónicos y añadiendo una pátina de antigüedad al conjunto.

Desde el primer momento, Isabela siente una extraña conexión con el lugar. Al recorrer las habitaciones polvorientas, encuentra viejas fotografías enmarcadas, cartas escritas con tinta desvanecida y objetos personales que pertenecieron a los antiguos habitantes. Se siente particularmente atraída por la historia de Sofía Valderrama, una joven que vivió en la casona a principios del siglo XX. Sofía era una talentosa pianista, cuya música llenaba los salones de la casa con melodías melancólicas y apasionadas. Sin embargo, su vida estuvo marcada por una profunda tristeza y un amor prohibido que la consumió.

Mientras Isabela trabaja en la restauración, limpiando cuidadosamente los frescos de las paredes y reparando los muebles antiguos, comienzan a suceder cosas extrañas. Escucha melodías de piano que parecen provenir de alguna parte de la casa, a veces un vals triste, otras veces una sonata apasionada. Siente presencias invisibles que la observan, cambios sutiles en la temperatura de las habitaciones y encuentra pequeños objetos que parecen moverse de lugar, como si alguien los hubiera tocado recientemente. Una noche, mientras trabaja hasta tarde en el salón principal, restaurando un antiguo retrato al óleo, una corriente de aire frío la envuelve repentinamente, erizándole la piel, y escucha un susurro suave que pronuncia su nombre: «Isabela…».

Intrigada y un poco asustada, Isabela comienza a investigar la historia de Sofía con mayor profundidad. Consulta los archivos del pueblo, habla con los habitantes más ancianos y examina detenidamente los documentos que encuentra en la casona. Descubre que Sofía se enamoró perdidamente de un joven llamado Gabriel, un hombre de clase baja que trabajaba en la hacienda de la familia Valderrama. Su amor era un secreto a voces entre los sirvientes, pero la familia de Sofía, aferrada a las convenciones sociales de la época, se oponía rotundamente a la relación. El padre de Sofía, un hombre severo y autoritario, consideraba que Gabriel no era digno de su hija. Una noche, tras una fuerte discusión entre Sofía y su padre, Gabriel desapareció sin dejar rastro, dejando a Sofía con el corazón roto y un profundo sentimiento de culpa, creyendo que su amor había causado la desgracia de Gabriel.

En medio de su investigación, Isabela conoce a Alejandro, un apuesto historiador local que también está interesado en la historia de la casona y la familia Valderrama. Alejandro, con su conocimiento profundo de la historia regional y su pasión por desentrañar los misterios del pasado, se convierte en un aliado invaluable para Isabela. Juntos, comienzan a desentrañar los secretos del pasado, descubriendo pistas ocultas en viejos documentos, como cartas codificadas y registros olvidados, y recorriendo los rincones más recónditos de la propiedad, desde los polvorientos sótanos hasta el ático lleno de telarañas. La atracción entre Isabela y Alejandro es innegable desde el primer encuentro, una conexión que va más allá de la simple colaboración profesional. A medida que trabajan juntos, compartiendo sus descubrimientos y sus inquietudes, su relación se profundiza, creando un vínculo que parece trascender el tiempo, como si estuvieran destinados a encontrarse.

Una noche, mientras exploran el antiguo estudio de Sofía, una habitación que conservaba aún el piano de cola y partituras manuscritas, encuentran un diario oculto en un compartimento secreto de un elegante escritorio de madera oscura. En él, Sofía relata con detalle su amor apasionado por Gabriel, sus encuentros secretos bajo la luz de la luna y los trágicos acontecimientos que llevaron a su desaparición. Descubren que Gabriel no se fue por voluntad propia, como se creyó durante mucho tiempo, sino que fue víctima de un complot urdido por el padre de Sofía, quien, cegado por el prejuicio y el temor al qué dirán, lo acusó falsamente de un robo y lo mandó encarcelar en una prisión lejana.

Con esta nueva información crucial, Isabela y Alejandro se proponen encontrar la verdad sobre el paradero final de Gabriel. Sus investigaciones los llevan a un antiguo cementerio abandonado en las afueras del pueblo, un lugar cubierto de maleza y lápidas desgastadas por el tiempo. Tras una búsqueda exhaustiva, encuentran una vieja tumba sin nombre, cubierta de musgo y casi ilegible. Al exhumar los restos con la ayuda de un arqueólogo forense, descubren, gracias a una pequeña medalla que llevaba consigo, que se trata de Gabriel, quien murió en prisión poco después de ser encarcelado, víctima de las duras condiciones y la injusticia.

La revelación de la verdad libera finalmente el espíritu atormentado de Sofía, quien por fin puede descansar en paz, aliviada de la culpa que la había perseguido durante tantos años. La presencia en la casona desaparece por completo, dejando un sentimiento de tranquilidad y serenidad que impregna cada rincón de la casa. Isabela y Alejandro, unidos por la investigación que los acercó y por el amor profundo que ha surgido entre ellos, deciden continuar con la restauración de la casona, transformándola en un centro cultural que honre la memoria de Sofía y Gabriel, un símbolo de un amor verdadero que trascendió el tiempo, la clase social y la adversidad. El eco del nombre de Sofía ya no es un lamento, sino una melodía que celebra el amor eterno.

]]>
https://devfredd.online/novela-corta-el-eco-de-tu-nombre-en-la-casona/feed/ 0